Kickstarter: Liberando la creatividad

Ilustración de Mercenary Kings, juego en etapa de fondeo.

Por Talya Aluveaux*

El staff pick y proyecto del día es el CD de un conjunto neoyorquino de jazz (The Jamie Baum octet). Necesitan poco más de 6 mil dólares para echar a andar el proceso de producción, edición, difusión y demás del disco, y gracias a Kickstarter han reunido ya el 42%.

Apenas ayer hablaba sobre crowdfounding, aterrizado en Bandtastic. En el caso de Kickstarter, el objetivo es, vía el mismo método, fondear todo tipo de proyectos creativos. Puede ser algo relacionado con arte, comics, diseño, moda, una película, juegos... puede ser música o fotografía, incluso una obra de teatro.

Uno de los proyectos más populares, de hecho el que más ha circulado en las noticias últimamente es el de investigación para el elevador espacial (ah, me faltó ciencia...), pero el que en realidad hizo que me interesara por Kickstarter fue Botanique Kickstarter Project, quizá porquer la solicitud llegó directamente a mi correo por parte de Harold Davis.

Instacube.

"Botanique", que ya reunió los fondos necesarios para su publicación, es un homenaje al arte botánico del siglo XIX... ¿no es algo fantástico? Cada uno de los proyectos de Kickstarter es la creación independiente de alguien "like you" (es lo que dice la página), aunque en realidad cierto background, cierta reputación es necesaria para cerrar exitosamente el proyecto.

Varios proyectos fondeados por Kickstarter se presentarán durante septiembre en el Toronto International Film Festival, docenas de juegos están esperando completar la meta para pasar a la fase de desarrollo luego de lanzar la campaña en Kickstarter, que por lo visto, y lo que dicen en el blog, es un trabajo de tiempo completo. Hay que convencer.

El último ejemplo exitoso en el caso de los juegos es "Planetary Annihilation", cuya meta era de 900K dólares. ¿Qué consiguen los fondeadores? Varía dependiendo del proyecto y en ocasiones, del monto invertido, pero puede ser desde un precio especial en la compra hasta el acceso a versiones beta y/o, como ironizan en el comic xkcd, acceso "vip".


El sitio, fundado en abril del 2009, alcanzó un éxito considerable durante 2010, ayudando a fondear cientos de proyectos recaudando millones de dólares. Ahora pueden encontrarse proyectos como el "Instacube", un portarretrato digital basado en Android capaz de reproducir los feeds de Instagram. En tiempo real. Ooookkkk.

Por cierto, faltan 20 días para la "fecha de corte" de este proyecto y ya cuenta con 2,343 backers (el mínimo es un dólar). La meta de 250K dólares hace mucho que fue rebasada. Ni hablar. Anyone with a webcam and an idea can try, they say. Me pregunto si habrá algún candado para AL puesto que no encontré ningún proyecto latino. Out.

Crowdfunding. O cómo lograr que Motorama toque en GDL y el DF

Por Talya Aluveaux

Crowdsourcing, un concepto simple pero poderoso, especialmente en la era de la globalización, es el aspecto fundamental en el que se centra Bandtastic para, con la ayuda de fans, propios y extraños, conseguir el apoyo ($$$) suficiente para que una banda quizá oscura y poco conocida en la escena mainstream, se presente en un determinado escenario para regocijo de sus fans.

El concepto se utiliza para designar cualquier actividad llevada a cabo por un conjunto de individuos, una crowd o multitud, con un fin determinado.

Bandtastic obtuvo el premio México TNW Startup Award.

Éste fenómeno se potencia con la Web, donde, en teoría, se puede conseguir la atención, y quizá la participación, de cientos de miles de personas a las que difícilmente se tendría acceso online. Cuando se trata de reunir fondos, se le conoce como CrowdFounding o Fondeo Colectivo. O como le llaman en Bandtastic: FanFunding.

El sitio del que hablo, Bandtastic, consiguió notoriedad hace un par de meses al conseguir, si no me equivoco, un importante premio para startups en México (México TNW Startup Awards). En su blog, se precian de haber conseguido importantes logros gracias al crowdfounding. Sin embargo, toman ahora un camino un tanto diferente centrándose en cosas como la venta de boletos y promociones de patrocinadores y dejando un poco de lado, aunque aclaran que no en el olvido, la cuestión del crowdfunding.

Era algo alentador ver algo así funcionar en México,del tipo "tú escoges la banda, nosotros la traemos", "lets make it happen...". Y sigue siendo alentador aunque esté tomando otro rumbo.

En efecto. En este momento aparece un gran recuadro promocionando la preventa de boletos para un festival musical que se llevará a cabo en septiembre (si no tienen tarjeta o forma de pagar con PayPal, los usuarios pueden pagar en cualquier oxxo o 7-eleven con Dinero Mail), y un poco más abajo recuadros con avances del fondeo colectivo para la presentación de "Motorama" (100%, boletos agotados, la aportación mínima era de 700 pesos) y el performance de cuatro bandas tapatías en el DF durante el Totally Rad Music Tour (28%).

BTW, Bandtastic acaba de conseguir una segunda ronda de inversión con Investomex. Sigámosle la pista en Twitter. Por cierto, si comulga con los gustos musicales de estos chicos, quizá quiera husmear por #bandtasticfm.

Out.

Por el poder del... smartphone! :P

Es cierto que las cámaras son crappyshit (bueno, al menos la de la blackberry), ¿pero no aman la capacidad que nos dan los smartphones de capturar un pedazo de realidad y enviarlo de un lado a otro instantáneamente?

Sí. Yo sé que no es ninguna novedad. Y no hablo de la foto del cumpleaños o la pose para facebook (ash!)... ni siquiera de twitpic (or didnt happen :S).

Hablo de la sensación de "empowerment" que te da poder comprobar algo instantáneamente, donde efectivamente una foto dice más que mil palabras. Como, por ejemplo (cof cof) la de unas ramas mal puestas en media calle por Aguah para señalar una fuga mal tapada y enviarla a @HermosilloGob junto con el reporte.

Claro, los amargosos de paso la despachamos a facebook con el hashtag #ciudaddelfuturo, pero esa es otra historia... Otro ejemplo es el alud de fotos que recibe asimeestacionoyo.com

El punto es que es interesante la forma en que algunas compañías han aprovechado esta capacidad que prácticamente todo el mundo tiene hoy en día. Bueno. Una en particular me llamó la atención, y es que de cierta manera no lo esperaba de una carrocería.

El anuncio de esta empresa (no me acuerdo del nombre!) dice algo más o menos así: "¿Chocaste?! Mándanos la foto! Te hacemos un presupuesto sin compromiso". Y luego viene el correo electrónico.

En serio. Me quedé pensando que no está mal. Tomen en cuenta que mis hermanos (y las esposas de mis hermanos, ejem) son muy amantes de chocar y "arreglarse" sin mediación de agentes de tránsito o seguros. Entonces un servicio como este realmente resuelve un problema en el momento, aunque se trate solo de una estimación (claro, asumiendo que reponen el e-mail con celeridad) para "ponerse de acuerdo".

Lo verdaderamente interesante es que algo que podría ser completamente engorroso (que venga el carrocero? describir los daños? er...) se facilita gracias a que esta gente se abre a usar una tecnología ya pervasiva para hacer un trabajo que, a todas luces, puede al menos estimarse en dichas condiciones.

No lo sé. Quizá peco de ingenua. ¿Recuerdan el tristemente célebre video de las "ladies de Polanco"? GRÁBALO, PERO GRÁBALO BIEN! La reacción instantánea es tomar una foto. Grabar. Asegurar el testimonio. A veces me sorprende que no desenfunden tipo viejo oeste. Los encendedores en los conciertos han sido reemplazados por celulares grabando (esto no tiene nada que ver pero es divertido :P).

El caso es que de pronto todos podemos sentirnos como Harrison Ford en Morning Glory, con micrófonos y cámaras de televisión evidenciando a un alto funcionario. Aunque sólo sea para denunciar una fuga mal tapada, o asegurar que nos paguen "in situ" lo que nos cobrará el carrocero.

Esta herramienta aparentemente inocua y superficial puede ser muy poderosa si entran en la ecuación dos palabras mágicas: crowdsourcing y folksonomy aka hashtags. Basta que a alguien se le ocurra hacer y promover el hashtag #fugashmo o #bacheshmo o qué se yo hmo para iniciar un streaming colectivo en twitter (ok, también puede ser de cosas buenas :P). ¿Por qué no? En serio. ¿Por qué no?

No es sólo para periodistas. No es sólo para fotógrafos. No es sólo para activistas. Es para todos los que queremos un lugar mejor para vivir. Just saying.

¡Así me estaciono yo!

Típico. Uno dando vueltas y vueltas por el estacionamiento buscando un lugar, y un imbécil estacionado en dos cajones. O uno llega cansado de la calle para encontrarse con un pickup atravesado en media calle y otro descaradamente estacionado en su casa, mientras "pistean" con la música a todo volumen. A todo dar...

No sé cómo les vaya a ustedes en estos casos, pero a mí se me sube la bilirrubina, me pongo histérica, no puedo disimular y mucho menos actuar de manera civilizada... ¿por qué habría de hacerlo? Esa clase de orangutanes no entienden más que a gritos. Ok, no...

Por lo general uno respira profundo y sigue buscando estacionamiento, o pide amablemente que muevan el carro para poder estacionarse (¡es el colmo!) en su casa. Pero ahora... ¡Oh, dulce venganza!

Es difícil describir la el sentimiento de oscura satisfacción al finalmente poder exhibir a estos cafres, gracias al poder del crowdsourcing y al sitio asimeestacionoyo.com

La próxima vez que un especimen de la era de las cavernas agote su paciencia en los ya de por sí congestionados estacionamientos, en lugar de repasar mentalmente todos los insultos habidos y por haber (o bueno, este paso no es necesario saltárselo), mejor saque su iphone o blackberry o pre o lo que sea, apunte y dispare. Tómele una foto.

El sitio funciona a través de un Login con Facebook, de manera que subir la foto es muy fácil. Hay de todo, el que se estaciona en la cochera ajena, el atarantado en franja rosa, el tarado en doble fila, el enfermo mental en el cajón para personas discapacitadas... en fin, usted ya los conoce. Abundan.

Tanto como uno quisiera ponerles la etiqueta de "pen.." en la frente o marcarlos al estilo de Inglorious Basterds, pues no. Pero al menos es un outlet para exhibirlos, un pequeño cobro de factura y un alivio para la neurosis provocada.

Un acierto y una agradable sorpresa el sitio creado por Germán Rodríguez (@germanson en Twitter), tanto para desahogar nuestras frustraciones automovilísticas como para promover la educación vial.

¡Hasta mañana!

Tips a leia.y2k@gmail.com*