Por Talya Aluveaux
Los tentáculos de Amazon han llegado a Hermosillo. Tienen tiempo aquí ya, pero había logrado desentenderme exitosamente del asunto. Bueno, pues no más. Desafortunadamente el llamado de la selva es demasiado fuerte -aparentemente así le digo ahora a la necesidad de escribir en este blog-. En fin, basta de reintroducciones.
El gran almacén, depósito o wharehouse está aquí. A lo largo de algunos meses estuve viendo algunos de los puestos que la firma ofertaba en LinkedIn, un poco alarmada al ver los requisitos que indicaban mucho movimiento y levantar cosas pesadas (relájate, talya, muchas personas tienen excelente condición física y pueden con esto y más). Eventualmente leí aunque sea de manera oblicua los anuncios oficiales con bombo y platillo. Amazon estaba en Hermosillo, derrama económica, etcétera.
Yo, por supuesto, en el pináculo del escepticismo seguía en estado de negación. Eventualmente mi cerebro comenzó a examinar (en autopilot, como suele suceder) algunas cosas que ustedes y yo sabemos de esta compañía, o al menos creemos saber: 1) Cada vez más ciudades se disputan la instalación de sus almacenes debido a la atracción de empleos y al imaginario que implica esta empresa de crecimiento meteórico (hablando de ganadores durante esta pandemia), 2) tenemos tiempo escuchando quejas de trabajadores acerca de la administración del tiempo aplicada en estos almacenes, que en algunos casos implica minutos reducidos de descanso e imposibilidad de acudir al sanitario, 3) aunque ya lo dijimos, lo repito porque es increíble (bueno, no) el crecimiento monumental que ha presentado la firma en el escenario pandémico que nos alejó de las tiendas físicas y convenció del comercio electrónico hasta al más reticente, con envíos al por mayor en todo el orbe, lo que explica la reproducción de estos almacenes como conejos en todo el planeta, o buena parte de él.
Sin ser exhaustiva, este es más o menos el contexto. Pero examinemos el fenómeno más de cerca, con un enfoque regional. ¿Qué pasa con Hermosillo, cuál es la repercusión de la instalación de un almacén de este tipo? En primer lugar, hablemos de lo obvio: cientos de empleos. Y ahora sí que como dicen los memes, pero a qué costo. Pues no lo sé. No estoy segura aún cuáles fueron los términos de la decisión de la empresa para instalar su almacén aquí, ni los detalles particulares. Tampoco sé si son públicos (probablemente no). Y no estoy segura de los sueldos, es decir, si son trabajos "bien pagados" o no, aunque partiendo de la descripción de los puestos de trabajo se puede pensar que se trata de mano de obra que no requiere de altos niveles de conocimiento para la ejecución de sus responsabilidades, más allá de seguir instrucciones, manuales operativos, etcétera. En este sentido -y sin demeritar, que fácil no es, de hecho es bastante difícil, estresante y cansado, por decir lo menos-, es similar a los ya familiares centros de contacto o call centers que proliferan en la ciudad. Entonces, al igual que éstos, aportan esencialmente dos cosas: empleos más o menos bien remunerados, y un acercamiento de los trabajadores hacia formas organizacionales de carácter global, acostumbradas a trabajar y ajustarse a ciertos estándares internacionales.
Fuera de ahí, lo cierto es que es, como dije al principio, un tentáculo más de amazon, o por decirlo de otra manera, uno de los últimos eslabones (si no el último) de la cadena global de suministro de la firma, lo que por supuesto tiene ciertas implicaciones, entre ellas, la nula generación de nuevo conocimiento y la baja demanda de profesionales altamente especializados con altos salarios. Corríganme si me equivoco. Si realizáramos una tipología con base en dos características de una firma, su anclaje en la región y su ubicación dentro de la CGS (Cadena Global de Suministro), probablemente nos encontraríamos una y otra vez con este fenómeno en casos como el de Amazon. La compañía no es local y no se trata de un headquarter o centro de desarrollo, entonces podemos esperar empleo sí, pero precario, poco interés en la región, nula derrama de conocimiento y poco o nulo desarrollo de éste. No estoy diciendo que sea malo, pero tampoco es tan bueno.
¿O ustedes qué opinan?
Out.
Dénle amor a esto: En instagram hay un hashtag dedicado a miles de mujeres que han decidido mandar a volar a los tintes para siempre, y es #silversisters. Recomiendo darse una vuelta.