martes, enero 10, 2012

¿Qué es toda esta obsesión con Angry Birds?


Me hice esta pregunta al ver la tira promocional sobre una bolsa de Doritos Nachos (confieso que he pecado). Y después en una de Adobadas. You get the idea. They were all over...

No hacía más de dos semanas había hecho una pregunta similar, pero el target era otro: ¿Qué es toda esta obsesión con Skyrim? ¿Sky-what? Mi ya no tan pequeño primo estaba obsesionado con su regalo de navidad.

I dont get it.

Y ahora esto. (ver foto :P)

Intento verlo como un fenómeno cultural. ¿Lo es, no? Pero no alcanzo a comprender la obsesión, como jamás comprenderé la obsesión con las estadísticas deportivas, o las telenovelas, o los reality shows. Oh well...

Es probable que se trate de un síndrome de indiferencia por los videojuegos (i know, i know...) que, debo confesarlo, sólo han logrado vencer, en este orden, Harvest Moon (GC), Professor Layton and the Curious Village (DS), GH (Playstation), DDR (PS, X360), algunos juegos de karaoke (no cuentan), rockband! y (last but not least) Katamary Damacy (X360).

Big Brain Academy también puede contarme entre sus víctimas. Y un poco Sencond Life. Que ni juego es :P Lets see... tetris, pacman, a bit of Sims (on the phone, stupid if you ask me). Thats about it.

En fin. La única vez que he probado Angry Birds fue en la Galaxy, y fue completamente anticlimático. Meh. Duh. Whatevz. Esa clase de reacción.

Y aún no he probado Skyrim. Aunque me han informado sobre los dragones. Dragones. Oh, sí. I guess. Neh...

¿Será la vejez? ¿El tan llevado y traído ADD (Atention Deficit Disorder)? ¿El apocalipsis?

Los videojuegos me interesan, pero sólo desde el punto de vista del gameplay/game design. Quizá un poco de análisis del género, para ubicarlo mentalmente. Y ya. Horror. Tragedia. Soy incapaz de disfrutarlos. Como los periódicos y canales de tv locales. Necesito ayuda profesional.

I dont even like the FPS genre anymore... Y eso que amo dispararle a cualquier cosa. Love big guns and destroying machines. REAL big guns and destroying machines.

Quizá todo se volvió demasiado intrincado, como en una mala adaptación de una novela de aventuras en 3D con efectos slow motion :/ I need the joy back.

Dear game designers: Not too simple. Not too complicated, either. No birds and no dragons. Oh and keep it cute. Is it too much to ask?

El fenómeno de los casual games (ie Angry Birds) es probablemente la respuesta a mi estúpida pregunta. ¿Qué puede ser más mainstream que aparecer en las bolsas de sabritas? ¿Qué nivel de complicación tiene? ¿Por qué están enojados esos malditos pájaros?*

¿Sabía que la incursión en este género es la única oportunidad de hacer dinero con facebook para cualquier compañía? JC says so.

Angry Birds, junto con Facebook, fue una de las aplicaciones más descargadas para iPhone durante el 2011. Drums, please.

Skyrim puede explicarse lo mismo que casi cualquier MMORPG. Nicho inexplorado por mi más allá de los recuentos fascinantes hechos por algunos de mis amigos. Hordas, magos, poderes, pociones, razas, clanes... You get the idea. There will always be an eager market for that.

En fin. Prometo jugarlos y regresar con yet more pointless ranting. Or not.

Hasta mañana!

PD Enlight me.
*I know now.

miércoles, enero 04, 2012

Los "frutos" de los DevHouse


Alguien le preguntó a HermosilloDevHouse en su página de Facebook si hay alguna startup hermosillense que haya tenido frutos. Ni que fuera árbol, pensé (tontamente, como siempre).

Pero claro, hasta la pregunta más simple puede responderse de manera elaborada (los lectores de El Colegio de Sonora son expertos en la materia), y como dicha pregunta se quedó sin respuesta "oficial", me dispongo a "elaborar" (sálvese quien pueda).

La persona que hizo la pregunta aparentemente tenía o tiene la idea de que los DevHouse son para startups, y creo que no es por allí. En todo caso siempre lo he visto como una oportunidad de reunión para programadores y entusiastas interesados en nuevas tecnologías y proyectos.

El primer DevHouse en Hermosillo, al que no asistí, sentó la tónica en la que se trabajaría de ahí en adelante. Al segundo sí fui, y hasta me obligaron a participar (:P) por lo que puedo decir con seguridad que es una experiencia edificante y enriquecedora.

Hay eventos especiales para startups, pero creo que los DevHouse cumplen dos funciones muy importantes: En primer lugar, reunir en un solo lugar a cuanto programador, entusiasta y/o aficionado local desee asistir, permitiendo que se conozcan entre sí, y en segundo, generar un ambiente propicio para el intercambio de ideas dentro del "mundo real" (offline, big thing with the blue roof).


De modo que no es simplemente una "fiesta para gente etiquetada como geek", sino algo más, me atrevería a decir mucho más que la suma de sus partes. Aún con sus limitaciones.

Ahora bien, en cuanto a los "frutos", me tomo la libertad de citar algunos de los referenciados en facebook por algunos dvhousers, entre ellos uno sobre juegos (de Roberto Carlos González Flores), uwisio y datashelves, aunque no necesariamente "nacieron" en un DevHouse, pero si dentro de la comunidad de desarrolladores sonorense.

Recuerdo claramente la presentación de los jóvenes estudiantes (quizá ya graduados) @omaraf y @gabreho en la que expusieron el proyecto de una iphone app para rankear las gasolineras de todo México, la atmósfera generada y el feedback que recibieron.

Y cómo olvidar los proyectos de @ebobby, las carjacadas provocadas por los videos sobre los usuarios de Twitter (no one, and EVERYYYY one), las peculiares colecciones fotográficas de una de las chicas del staff de nearsoft, los tips de diseño y color de @dianonina o los charts sobre el uso de Twitter de @patty-la.

Y eso que no he ido a muchos. Lo que es más, estoy segura que varios de los que han tenido la fortuna de pasar por un DevHouse se han quedado con la inquietud de iniciar un proyecto, aunque sea uno chiquito,  aunque sólo sea por gusto, por aprender y compartir.

Hasta mañana.

domingo, octubre 30, 2011

Sonora y sus IT technology parks

Es una inquietud que no me puedo sacudir. Quiero saber que va a pasar. Quiero saber cómo pasó. Quiero saber qué pasó. Quiero saber lo que no pasó y por qué. Y es fascinante. Es una especie de novela de intriga. Estoy segura que la trama es mucho más compleja de lo que alcanzo a ver/comprender.

Pero veamos. A mi entender la historia se remonta al sexenio de Eduardo Bours. Claro. Fue por entonces que empezó a hacer ruido TI Sonora (que ya no existe y desaparece de manera sospechosa) y algo antes que inició lo que hoy se conoce como Prosoft, el órgano de la Secretaría de Economía dedicado a promover la industria del software como tal en nuestro país.

Hasta aquí todo bien. Prosoft apoyaría económicamente a las compañías dedicadas al desarrollo de software, en el caso de nuestro estado, a través de TI Sonora. Aparentemente. Hasta donde yo sé.

Una gran tajada de los apoyos fue para este organismo. Otras (pequeñas) tajadas se fueron a compañías como Vangtel y Novutek. En la página de la Secretaría de Economía están las tablas con las cantidades exactas.

Por ese entonces, la idea (de Sonora y prácticamente todos los estados del País*) era convertirse en un polo atractivo de desarrollo de software para compañías extranjeras, con base en el éxito de países como la India y el boom del outsourcing o tercerización de servicios.

En pocas palabras, el plan maestro era capitalizar la masa crítica de egresados de carreras de ingeniería de software y afines disponible en el estado mediante la creación de tres parques tecnológicos de software, uno en Obregón, uno en Hermosillo y uno en Nogales.

Es hora que no tengo noticias del de Nogales (por cierto, busco desarrollador de ahí, wink wink), he visto, sólo de lejos, el de Hermosillo y al fin conocí el de Obregón. Sí. Hay que pasar por un fraccionamiento para llegar.

Les contaré sobre las instalaciones. Son excelentes. Y no sé si es porque lo visité un sábado pero lo que más me llamó la atención fue la soledad. Si me piden mi impresión, mi impresión fue la de un recinto solitario, apenas ocupado por tres o cuatro compañías. Al lado se construye -a paso de tortuga, con muy pocos trabajadores y menos maquinaria- lo que podría convertirse en un centro de investigación.**

Estuve en Novutek. Es exactamente lo que había imaginado (recuerden, fue un sábado). No estaba la recepcionista pero sí un puñado de desarrolladores. Hice mi entrevista y me fui, no había tiempo para más. Y en el camino de regreso todo fue cavilar (soy experta, las películas malas y el insomnio crónico no ayudan).

Cavilar en por qué está tan solo el edificio. Cavilar en la información que tenía y no podía discutir aún (off the record), cavilar en muchas cosas que me han dicho y que no podré poner en mi tesis, cavilar en por qué no hay un parque aún en Nogales (aunque creo que tenemos la respuesta), cavilar en el parque de Hermosillo y por qué aún no lo conozco***. Cavilar en dónde está toda esta información. Cavilar en el uso que se le dió (o dá) a los fondos de Prosoft. Cavilar en cómo se está repartiendo el pastel en este momento. Cavilar en la calidad de los egresados de carreras de TI.

Cavilar y cavilar.

Pueden estar seguros que seguiré cavilando. Y cuando tenga algunas respuestas se los haré saber. Aunque algunos de ustedes probablemente ya las tengan.

Hasta mañana.

*Imposible, como veremos en un post más adelante.
**Not allowed to discuss it.
***I shall take my lazy ass over there tomorrow.




viernes, octubre 14, 2011

Por el poder del... smartphone! :P


Es cierto que las cámaras son crappyshit (bueno, al menos la de la blackberry), ¿pero no aman la capacidad que nos dan los smartphones de capturar un pedazo de realidad y enviarlo de un lado a otro instantáneamente?

Sí. Yo sé que no es ninguna novedad. Y no hablo de la foto del cumpleaños o la pose para facebook (ash!)... ni siquiera de twitpic (or didnt happen :S).

Hablo de la sensación de "empowerment" que te da poder comprobar algo instantáneamente, donde efectivamente una foto dice más que mil palabras. Como, por ejemplo (cof cof) la de unas ramas mal puestas en media calle por Aguah para señalar una fuga mal tapada y enviarla a @HermosilloGob junto con el reporte.

Claro, los amargosos de paso la despachamos a facebook con el hashtag #ciudaddelfuturo, pero esa es otra historia... Otro ejemplo es el alud de fotos que recibe asimeestacionoyo.com

El punto es que es interesante la forma en que algunas compañías han aprovechado esta capacidad que prácticamente todo el mundo tiene hoy en día. Bueno. Una en particular me llamó la atención, y es que de cierta manera no lo esperaba de una carrocería.

El anuncio de esta empresa (no me acuerdo del nombre!) dice algo más o menos así: "¿Chocaste?! Mándanos la foto! Te hacemos un presupuesto sin compromiso". Y luego viene el correo electrónico.

En serio. Me quedé pensando que no está mal. Tomen en cuenta que mis hermanos (y las esposas de mis hermanos, ejem) son muy amantes de chocar y "arreglarse" sin mediación de agentes de tránsito o seguros. Entonces un servicio como este realmente resuelve un problema en el momento, aunque se trate solo de una estimación (claro, asumiendo que reponen el e-mail con celeridad) para "ponerse de acuerdo".

Lo verdaderamente interesante es que algo que podría ser completamente engorroso (que venga el carrocero? describir los daños? er...) se facilita gracias a que esta gente se abre a usar una tecnología ya pervasiva para hacer un trabajo que, a todas luces, puede al menos estimarse en dichas condiciones.

No lo sé. Quizá peco de ingenua. ¿Recuerdan el tristemente célebre video de las "ladies de Polanco"? GRÁBALO, PERO GRÁBALO BIEN! La reacción instantánea es tomar una foto. Grabar. Asegurar el testimonio. A veces me sorprende que no desenfunden tipo viejo oeste. Los encendedores en los conciertos han sido reemplazados por celulares grabando (esto no tiene nada que ver pero es divertido :P).

El caso es que de pronto todos podemos sentirnos como Harrison Ford en Morning Glory, con micrófonos y cámaras de televisión evidenciando a un alto funcionario. Aunque sólo sea para denunciar una fuga mal tapada, o asegurar que nos paguen "in situ" lo que nos cobrará el carrocero.

Esta herramienta aparentemente inocua y superficial puede ser muy poderosa si entran en la ecuación dos palabras mágicas: crowdsourcing y folksonomy aka hashtags. Basta que a alguien se le ocurra hacer y promover el hashtag #fugashmo o #bacheshmo o qué se yo hmo para iniciar un streaming colectivo en twitter (ok, también puede ser de cosas buenas :P). ¿Por qué no? En serio. ¿Por qué no?

No es sólo para periodistas. No es sólo para fotógrafos. No es sólo para activistas. Es para todos los que queremos un lugar mejor para vivir. Just saying.

jueves, octubre 13, 2011

Steve Jobs y Dennis Ritchie. I had to do it...


En serio no puede uno bajar la guardia. Steve Jobs. Dennis Ritchie. What´s next? :S

Poco puedo añadir a lo que ya se ha dicho, y escribiré desde el corazón, aunque suene a cliché. Como dicen en Twitter: "háganle como quieran".

Primero. Jobs. It was kind of a shock. Juro que traté de mantenerme indiferente. De guardar distancia emocional. Quiero decir, sabía (sabíamos) que estaba gravemente enfermo.

Pero entré en shock. Uno siempre piensa que se salvará, que se repondrá (y me tachan de catastrofista). Alguien con algún método experimental en algún lado puede hacer algo por él, ¿no? Pues no.

No.

Y es un no tan rotundo. Tan universal. Tan devastador.

No.

Y entonces recuerdo la primera vez que use una mac en el H. Periodico. Ya no eran cosa nueva, eran un tanto lentas. Ni siquiera recuerdo que versión de sistema operativo tenían, pero definitivamente eran beige.

Era el verano de 1998. Así, precisamente en esas viejas Macintosh, comencé a leer y leer sobre tecnología, rodeada por los editores de "Perfiles", "Sociales" y "La Travesura" (sin comentarios). Ahí fue donde edité una primera página de la sección de Informática del H., y no lo cuento porque sea importante sino porque en esa primera página cometí mi primer gran error editorial y me di cuenta del verdadero peso y alcance de una noticia que pasé a interiores: El nacimiento de la iMac. Era una neófita.

Mi entonces editor, Federico Cirett, me "ubicó"y me pidió que la notita perdida en interiores la convirtiera en nota de portada para el lunes de la próxima semana. La medida de la novatez es no saber dimensionar, no comprender, no calibrar, no entender ante lo que estamos aunque nos peguen con un ladrillo en la cabeza. Y así, escribí sólo algunos párrafos. No sabía que decir.

Pero era el regreso triunfal de Jobs. Y poco a poco supe que decir. Leí todo lo que pude. La historia de Apple, los intentos fallidos, los mitos fundacionales, Wozniak, las correrías de la presentación de la primer Apple en el CES...Fue intenso, y el inicio de una love-hate relationship.

Amaba los diseños, sabía que era víctima de la mercadotecnia y no me importaba (considerenme miembro de la cofradía del campo de distorsión de la realidad) y deseaba fervientemente cada uno de los nuevos productos de la nueva Apple. Admiré siempre la naturalidad con la que desechaba y/o adoptaba nuevas tecnologías. Fue mi héroe cuando desechó el disquete. O los cables. O el ipod. O el iphone. O el shuffle. Incluso el cube. Mac OS X (Genius) ¡El iBook!

Nunca estuve en una de sus keynotes. Siempre pendiente de cualquier stream.

Anyhow. No. Sadly, no. A beautiful, crazy, iconoclast mind.

And then Ritchie.

El primer lenguaje de programación que "aprendí". Mi primer hola mundo. C. Unix. El primer sistema operativo que usé. Mi primer correo electrónico. Mi primer encuentro con la World Wide Web (sí, en modo consola).

C siempre me pareció tan elegante. Tan fascinante. And then the book. La biblia de programación para muchos, para mi.

Por Dios. ¿Qué no está hecho en C? Seminal. Básico.

Gone.

Hats off. To both gentleman, each in its own, genious, particular way. They changed the world its not an empty sentence, because they changed mine.

martes, agosto 09, 2011

¿Quién le teme a BlackBerry messenger?


Dios. Los deja uno una semana y vean lo que pasa. Bajan las calificaciones de deuda. Las bolsas son un desastre. Disturbios en Londres.

Quería decir que me parecía una belleza recibir el Reuters Technology Report (afternoon dispatch), algo así como la versión moderna de aquéllos diarios de la tarde que imagino -no sé bien por qué- inquisitivos e interesantes. De verdad no sé por qué.

Les decía. Quería escribir sobre eso. Pero algo llama mi atención. Según Reuters, un legislador pidió que se suspendiera el servicio de mensajería instantánea de BlackBerry, luego de que se supo que fue utilizado para movilizar personas durante los disturbios en Londres y otras ciudades británicas.

En el siempre conciso (a mí me gusta) reporte de Reuters, citan de inmediato a John C. Abell, el director de Wired.com en Nueva York, quien respondió a uno de los posts en Reuters con lo siguiente:

"Necesitamos comenzar a ignorar la cortina de humo en que consiste el tema de cómo la tecnología es responsable por comportamientos malos o indeseables. Es cosa de regimenes opresivos a la Farenheit 451".

Y me quedo pensando en la razón que tiene. Así como no era posible culpar o responsabilizar a los libros por los comportamientos de las personas, y era una aberración quemarlos, tal como lo percibimos en esta magnífica obra de ciencia ficción, sería una aberración terrible suspender una red de comunicación para impedir el intercambio de mensajes entre ciertos miembros.

Lo dice mucho mejor Ben Rooney en el Wall Street Journal: Las tecnologías de comunicación son moralmente neutras. El hecho es que un alto porcentaje de los jóvenes ingleses usan BBM para comunicarse. Y claro, los mensajes a través de BBM son más difíciles de rastrear. Pero RIM coopera con las autoridades.

Estamos hablando de 45 millones de usuarios activos a nivel mundial, 70% de los cuales envían entre sí miles de millones de mensajes mensualmente.

Que no haya cacería de brujas, dice Reuters. Que así es como lo habría querido Churchill.

¡Hasta mañana!

Tips a leia.y2k@gmail.com

martes, agosto 02, 2011

Vendobara, yo y mi piano Monticello

Fue amor a primera vista. Anhelaba un piano desde que el que tenía cuando era pequeña comenzó a fallar al punto que el ruido interno era más escandaloso que las poco melodiosas notas que lograba arrancarle mientras intentaba tocar "El cóndor pasa" o "Blanca navidad".

"Cuesta 3,500", me dijo la señora del tianguis (flea market ftw, no, really...) y voilá, en cosa de días ya era la propietaria de esta reliquia, un Monticello circa 1975 con el que podía experimentar a mi antojo (lo siento por mis vecinos) y "reencontrarme" con mi viejo amor, aquéllas piezas clásicas para aprender. Twinkle twinkle ... Little star...

Fast foward to present time.

Sigo interesada en aprender a tocar el piano, pero tendré que hacerlo en una academia. Mi casa es tan pequeña que no importa dónde lo ponga, ocupa demasiado espacio. ¿Y qué hace una, tan tech-savy, tan avant garde, tan techno proof (lol)? Pues va y lo anuncia en vendobara.com. ¿Qué no?

Siendo como soy en realidad, una neoamish cascarrabias, no me había dado la gana, ni el tiempo, de crear una cuenta en esos engendros (vendobara, mercadolibre, and the like...), sin embargo, había sido testigo de un par de transacciones exitosas dentro del circulo familiar. Mi novio había puesto a la venta su blackberry usada y la cosa fue todo un éxito.

Mi hermano había vendido no sé cuantas cosas. Un primo de mi novio había comprado piezas que le hacían falta para su carro. Y así hasta el infinito. Así que allá voy, rauda y veloz, a registrarme y anunciar el bendito piano. ¿Y qué pasa? Nada. Lo anuncio en el precio original. Nada. Le bajo un poco. Nada. Le bajo más. Nada.

Eventualmente aparece un interesado. Llega un correo y me ofrece $1,500 pesos. No me agrada la idea (el genio financiero en mi, lol), pero eventualmente decido que no importa, puesto que lo que realmente necesito es deshaceme de él, por lo pronto. Finalmente accedo, y no vuelvo a saber nada del "cliente".

Luego se reporta otra persona. Mismo precio. Ofrece. Queda "muy formal" de pasar a recogerlo. Incluso pone día y hora. Espero, y espero... Quien me manda confiar en la gente. En resumen, el sujeto nunca llegó.

Luego viene la sabiduría popular: "Así es en vendobara. De quince que te hablan, uno es el que pega". Plop. Vaya, vaya... Cáspita. Recórcholis. Rayos y centellas.

Hoy me despierta un nuevo e-mail:

Buen dia
Estoy interesado en el Piano y me gustaria saber las condiciones en que se encuentra, ademas, żno estaba anunciado en un precio mas bajo?
Muchas gracias


Sí, Omar. Sí estaba anunciado en un precio más bajo. Pero ya lo volví a poner en lo que me costó originalmente. Te agradecería que no me hicieras perder el tiempo. Adiós bye.

Bueno, no fue eso lo que le respondí. Pero creo que no sirvo para "dealer". En todo caso, me dispongo a hacer un anuncio tipo "FOR SALE", imprimirlo, sacarle copia y pegarlo en un par de murales de algunas escuelas primarias. Ese tip me lo dio el señor de los raspados. O de plano sacarlo a la calle con un letrero.

Tech-savy my *ss.

Hasta mañana.

Tips a leia.y2k@gmail.com

La bio de Miguel; lo prometido es deuda

Por Talya Aluveaux @talya Miguel de Icaza nació en 1972. Es un programador, mejor conocido por iniciar los proyectos GNOME, Mono y Xamarin. ...