jueves, octubre 14, 2021

Blue Origin, el capitán Kirk y Bruno Latour

Por Talya Aluveaux


¿Ustedes también están emocionados por la exploración espacial? Creo que estuve mirando el video de CNN en YouTube de principio a fin un poco con la boca abierta, escuchando (o tratando de) las palabras de William Shatner (Capitán Kirk en Star Trek) y siendo testigo de su fascinación, un poco embobada.


Así que, Blue Origin. Oh, no esperaba esta reacción. Creo que no la tenía desde la primer carrera de vehículos autónomos en el desierto de Mojave, entonces patrocinada por la DARPA. Y por supuesto, con las rovers. La plataforma de lanzamiento esta vez: El desierto del oeste de Texas (Launch Site One). Una cápsula espacial y Shatner, ahora la persona de mayor edad en haber estado en el espacio, conversando sobre la experiencia con Bezos. Que ya no es CEO de Amazon porque exploración espacial.


Confesión: Tengo años mirando a este personaje primero con admiración, luego con animadversión, y ahora no sé con qué, sentimientos e ideas encontrados, supongo. Sin embargo, indudablemente es hora de prestar atención a Blue Origin. Por ahora, quiero quedarme con las palabras de Shatner: "Todo el mundo debería experimentar esto".


Creo que mi primer contacto con la exploración espacial (obvio, imaginaria) fue de la mano de Carl Sagan con su libro COSMOS, con su clásica unidad de millones de millones en una hermosa edición ilustrada, la única por entonces (¿1984?) en los estantes de una biblioteca en uno de los pueblos de la sierra de Sonora. Viajé, por supuesto, a los confines de nuestra galaxia, a otras galaxias y más allá. La verdad pasé días sin poder dormir pensando en lo infinito del universo, un poco aterrorizada. La capacidad para dormir regresó (es un decir) una vez entendí que jamás lo iba a entender, pero la zozobra y/o el vértigo de lo inconmensurable nunca me ha abandonado. 


Vanity Fair eligió el título: "¿Es eso lo que es la muerte?", de entre todas las palabras de Shatner sobre su viaje. Los editores de Digg decidieron centrarse en la pausa que hizo Bezos para destapar la champaña y rociar a los presentes en celebración, antes de continuar su charla con Shatner. CNN hizo una transmisión en vivo y tituló el video del streaming "la experiencia más profunda que puedo imaginar". Es imposible seguirlo ignorando.


En fin, que Blue Origin completó exitosamente su segundo viaje sub orbital tripulado con humanos a bordo (New Shepard, misión NS18). Incluyó a cuatro astronautas amateur: Dr. Chris Boshuizen (cofundador de la empresa de imágenes satelitales Planet), Glen de Vries (ejecutivo de una corporación francesa de software sanitario), Audrey Powers (vicepresidenta de Blue Origin) y, como hemos visto, William Shatner (además de miles de postales de la fundación "Club for the Future". La firma planea un viaje más este año, y varios el 2022


Me sobrecoge la paradoja. Viajar al espacio mientras nuestro planeta -nuestro hermoso y resiliente planeta- tiene tantos problemas de todo tipo. Podemos poner al hombre en la luna -o hacer turismo espacial-, pero no evitar el cambio climático, o los genocidios, o el racismo o las guerras religiosas, o la pobreza o tantas injusticias. Una pandemia global.


Bruno Latour toca el tema tangencialmente en algunos de sus textos, reflexionando en todo ese grupo social que parece estar pensando o tiene la perspectiva de "irse" algún día, contrapuesto a la mayoría de la población, que tendrá que "quedarse" y lidiar con las consecuencias de la contaminación, el cambio climático, los problemas sociales, la sobrepoblación y un largo etcétera. Un grupo de privilegiados que cree que saltará a los botes salvavidas mientras el barco se hunde lentamente. O al menos pareciera que eso piensan, mientras alimentan industrias altamente contaminantes y se niegan a ajustar sus conciencias en lugar de encaminarlas a paliar los desequilibrios ecológicos que hemos causado por tantos y tantos años.


¿Han notado cómo cada vez asesinan a más activistas ambientales, al menos en México? Yo sé que empecé en una nota optimista que se fue degradando con el paso de los párrafos, y ahora esto parece una marcha fúnebre o una mala copia de una oscura novela de ciencia ficción. Pero supongo que así es todo en este punto pálido azul, de luz y sombra, de escalas de grises. Irse o quedarse, esa es la cuestión. En realidad es una elección urgente, filosófica, personal. Pero sobre todo metafórica.


@talya


Estadísticas clave de la misión:


Crew capsule apogee: 347,539 ft AGL / 351,186 ft MSL (106 km AGL / 107 km MSL)

Booster apogee: 347,160 ft AGL / 350,807 ft MSL (106 km AGL / 107 km MSL)

Official launch time: 9:49 AM CDT / 14:49 UTC

CC Landing Time: 9:59 AM CDT / 14:59 UTC

Mission elapsed time: 10 min 17 sec

Max ascent velocity: 2,235 mph / 3,597 km/h


Antes de irnos: 


1. Hoy continúa el #1erEncuentroNacionalisi, organizado por la Unison, división de ingeniería, departamento de ingeniería industrial y el programa de ingeniería en sistemas de información, y en este marco se hoy se presentará el proyecto GraphBerries, por parte de alumnos del ITESO, en punto de las 12:00 horas (tiempo de hermosillo. La cita es en https://bit.ly/3Fzsd9U.


miércoles, octubre 13, 2021

A la caza de bots, trolls y el lenguaje de odio: cuatro herramientas

Por Talya Aluveaux


Esta mañana el Instituto de Ciencias de Redes de la Universidad de Indiana, en colaboración con su observatorio de Social Media, reunió en una sesión de zoom una serie de demostraciones de cuatro de las herramientas más importantes actualmente para el análisis y detección de lenguaje de odio y bots en línea: BotHunter v1, Botometer, BotSlayer Beta y Net Mapper.


Aquí es cuando una está agradecida por estas maravillosas sesiones en línea, de acceso libre y gratuito (y breves además). Aunque el tiempo de exposición (15 minutos) de cada herramienta es poco, es suficiente para adquirir una idea del potencial de cada uno (y la curva de aprendizaje), así como su aproximación y/o enfoque hacia la caracterización de lo que conocemos como un bot.


En algunos casos, como Botometer y BotSlayer, es necesaria cierta habilidad para el trabajo con API´s para el trabajo a escala. Desarrollada en la Universidad de Indiana, la herramienta ayuda a identificar el comportamiento bot-like de los agentes de una red social. Bajo esta perspectiva, todos podemos tener un cierto porcentaje, pero hay algunos indicadores, como por ejemplo, el nunca dejar de tuitear (día y noche) que delatan la naturaleza del agente. La herramienta permite revisar la cuenta propia, de seguidores y amigos, y exportar los resultados en formato .json (Java Script Object Notation).


En el caso de BotHunter v1 (Carnegie Mellon), la herramienta realiza una clasificación de las cuentas, construyendo una caracterización. Que la cuenta sea bot o no depende de su clasificación en los umbrales de los "bot scores". En esta herramienta se hace énfasis en la clasificación de los bots (y su evolución). Para una probabildad consistente de que la cuenta consista en un bot, debe alcanzar un score de 40 puntos, y para una predicción estable de esta caracterización, la generación de entre 20 y 40 tweets (funciona solamente para twitter). Hay que tomar en cuenta que no todos los bots son malos, y de hecho algunos son útiles.


Una de las palabras clave al hablar de este tipo de herramientas es "predicción". ¿Qué tan acertadamente podemos predecir que una cuenta es un bot, o que un comentario determinado entra en la categoría de lenguaje de odio? ¿Todas las cuentas y/o comentarios en un conjunto de datos? Es más complicado de lo que parece cuando el que lo determina no es un humano, sino un algoritmo, con base en teoría emanada de las ciencias sociales, y la ayuda de un conjunto de variables.


Una tercera herramienta expuesta esta mañana fue BotSlayer beta. El expositor destacó, y lo sabemos, que la manipulación puede darse de formas diversas, y se trata de un problema complicado. Así, esta herramienta se decanta por dejar al usuario la decisión de si se trata de un caso de manipulación o no, considerando escenarios en los que se analiza el flujo de información entre cuentas.


Por último, retomando la perspectiva de la psicolingüística, Net Mapper (todavía no es público) es una herramienta de apoyo en el análisis del lenguaje de odio y el trolleo, ambas manifestaciones agresivas clave de los fenómenos de conflicto en línea. Al igual que en otras de las herramientas descritas, destacan la importancia de la clasificación entre estos dos comportamientos (hate speech vs trolling), así como el hecho de que un troll no es necesariamente negativo (puede tratarse de cuentas de humor o ironía).


NetMapper resulta verdaderamente interesante, pues incorpora léxico multilingüe (más de 40 lenguajes) y es multiplataforma (twitter, reddit), y por tanto mucho más útil que las herramientas que sólo trabajan con una red social y/o se enfocan únicamente en el idioma inglés. Según lo explicado por el expositor, se trata de herramientas basadas en teoría de las ciencias sociales, por ejemplo, la conceptualización del odio con base en la identidad. De esta manera, crean un modelo de lenguaje de odio que utiliza teoría de la identidad social para producir predicciones rápidas, interpretables y generalizables, con un 83% de precisión entre conjuntos de datos.


Todas estas herramientas pueden ayudarnos a comprender mejor los conflictos en línea. Algunos de los hallazgos utilizando NetMapper, por ejemplo, muestran que los grupos de odio se caracterizan por pertenecer a distintas sociedades y "targets" u objetivos, pero sus estructuras son similares. 


Quizá no estemos muy lejos de la ubicuidad de estas herramientas, algunas que por ahora tienen una elevada curva de aprendizaje, otras funcionalidad limitada y algunas aún no disponibles para el público, pero sin duda cada vez más necesarias en el marco de una carrera desbocada en una pista de social media sólo para locos.


¿Cuánto tiempo pasará para que podamos activar el hate speech detector y el troll hunter? Uno de los participantes de la videoconferencia preguntó al desarrollador de NetMapper cómo esta herramienta específica podía ayudar a los periodistas a buscar patrones sobre la evolución en curso de una campaña de manipulación, pero no obtuvo una respuesta clara, al menos no de manera inmediata. 


Queda estar pendientes, y trabajar en la construcción de una mejor ciudadanía, procurando no contribuir a la propagación de los discursos de odio, o funcionando como cámara de eco para los trolls, al menos cuando los detectamos intuitivamente. Bloquear, reportar y no alimentar es siempre la consigna, hasta que haya herramientas automatizadas que funcionen como red flags para desactivarlos de manera un poco más efectiva, aunque tristemente nunca desaparecerlos del todo, porque naturaleza humana.


@talya


Antes de irnos:

1. Hoy se lleva a cabo el primer Encuentro Nacional de ISI, organizado por la Unison, la División de Ingeniería, el Departamento de Ingeniería Industrial y el programa de ISI (Ingeniería en Sistemas de Información) y en este marco, un grupo de estudiantes guiados por el Dr. Federico Cirett presentará el proyecto Glycosa by Diabsen, una aplicación móvil para medir la glucosa a través de la reacción de la luz en la saliva. La cita es en la sala virtual https://bit.ly/3Dwq3WS a las 12:00 horas. Vía @Rql_Torres






martes, octubre 12, 2021

Coecyt: Algunas pistas presupuestales (o ahora estoy más confundida que antes)

Por Talya Aluveaux


Les diré que estoy entusiasmada y a la vez, un poco deprimida. Ayer recibí oficialmente mi primer "tip" desde la reactivación de este blog (todavía está en terapia intensiva), donde se me recomendaba revisar el registro presupuestal del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología con el fin de explicar un poco mejor el estado de las cosas.


Y pues, a revisarlo voy, aunque sólo está disponible hasta el 2018. Entonces, solamente tenemos registro de la información 2013-2018 en la página de transparencia del gobierno del estado de Sonora, pero algo se podrá hacer. 


Bueno, a ver. En el PROGRAMA ANUAL 2014 aparece el rubro MINISTRACION DE RECURSOS PRESUPUESTALES PARA LA OPERACION DEL CONSEJO ESTATAL DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA, pero ni un peso en las columnas correspondientes a los trimestres. Justo arriba aparece la misma leyenda, pero para la operación del FONDO NUEVO SONORA CONSEJO ESTATAL DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA, que asumo es el presupuesto asignado a Coecyt ese año. En este caso, aparece un total de $3,511,000 pesos correspondientes al primer trimestre. El resto de los trimestres está en ceros.


El 2015 ya no fue necesario hurgar en el presupuesto de egresos, pues hay un oficio dirigido al entonces titular, Alonso Martinez Castillo, en el que se notifica del monto, un total de $3,264,895 pesos. Un ligero descenso.


Para el 2016, el monto disminuyó a $2,901,086.73 pesos, y había un nuevo director, el Ing. Francisco Antonio Rodríguez Valdéz, a quien aparece dirigido el nuevo oficio de la Secretaría de Economía. Vemos una tendencia en la que conforme pasa el tiempo, el presupuesto se reduce cada vez más, pero el 2017 se recupera un poco con una asignación de $3,855,045 pesos.


Esta vez, por cierto, se incluye un "Analítico de metas", el cual considera los siguientes rubros a evaluar: 1) Alianzas estratégicas entre organismos, empresarios, instituciones de educación, centros de investigación para impulsar el desarrollo de tecnologías e innovaciones; 2) Eventos de capacitación, difusión y promoción de fondos y programas para el desarrollo científico, tecnológico y de innovación; 3) número de becas y estímulos otorgados para impulsar y fomentar la especialización de capital humano aplicada en la industria; 4) eventos y talleres de apropiación social de la ciencia y la tecnología; 5) número de becas otorgadas para el desarrollo de capital humano en sectores estratégicos; 6) número de usuarios atendidos a través de programas interactivos y didácticos orientados a la ciencia y la tecnología; y cinco más orientados a cuestiones de índice de eficiencia en el ejercicio del gasto, observaciones de auditoría al informe de cuenta pública, calidad de informes y demás asuntos relacionados. 


Para el 2018, hay un cambio notable. El presupuesto los años revisados anteriormente se desglosaba en a)servicios personales, b)materiales y suministros y c)servicios generales, pero esta vez se añade d)inversiones financieras y otras provisiones, por un monto de 10,000,000 pesos. Así, el presupuesto total asciende a 16,490,366.00. Vaya salto. ¿Inversiones financieras? En la nota que revisé ayer el titular hablaba de recortes financieros a nivel federal. No lo sé, Rick.


Esta vez también se incluye un analítico de metas y la segmentación varía un poco, para incluir índices (en lugar de "número de"), número de proyectos de alto impacto apoyados para el desarrollo científico, tecnológico y de innovación en el estado, intensivos a investigadores por el desarrollo de conocimiento en las áreas científicas, tecnológicas y de innovación, y estímulos destinados al otorgamiento de premios y recompensas a personas físicas y/o morales en el área de investigación CyT. Me imagino que ahí se destinaron los 10 millones excedentes este año, pero sigo un poco confundida.


Y en fin, sí hay información sobre 2019. El presupuesto de egresos 2019 indica un total de $11,735,318 pesos. Entre paréntesis, ahora el rubro de servicios personales asciende a $4,133,379, materiales y suministros $107,021, servicios generales $1,601,703.00 y aparece de nuevo el rubro "Inversiones financieras y otras previsiones", esta vez con 2,500,000 pesos. También aparece desglosado "sueldos", con $176,186 pesos, y "Subsidios a la inversión", con $3,235,000 pesos. 


Entonces, no. El presupuesto no disminuyó, al menos no el estatal si hacemos caso a los documentos oficiales de la página de transparencia del gobierno del estado, y aquí la dejamos, así que ahora estoy más confundida que antes. Cualquier tip para esta confundida pero un poco menos desinformada autora, favor de enviarlo a leia.y2k@gmail.com


Presupuesto de Egresos Coecyt (2014-2019)


2014 3,511,000.00

2015 3,264,895.00

2016 2,901,086.73 

2017 3,855,045.00

2018 16,490,366.00

2019 11,735,318.00


Fuente: Transparencia Sonora/COECYT


Antes de irnos:


1. La firma Apple confirmó un evento para el próximo 18 de octubre, desatando la anticipación entre los seguidores de la compañía. ¿Qué podrá ser? #Unleashed #AppleEvent


lunes, octubre 11, 2021

¿Y qué ha sido del Coecyt?

Por Talya Aluveaux


No estoy segura si están conscientes de que en Sonora existe un Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología (Coecyt), mismo que fue creado a partir de la publicación de la Ley Estatal de Ciencia y Tecnología hace un par de décadas, y recientemente adicionada y modificada.


La existencia de este tipo de organismos y leyes es, teóricamente, importante para el desarrollo tecnológico regional, y constituye parte de lo que en la jerga de los SRI (Sistemas Regionales de Innovación) se conoce como el componente institucional. 


Este componente debe funcionar en conjunto y sincronía con el resto (capital humano, instituciones de educación superior, etcétera) para generar condiciones -otra vez, en teoría-, capaces de detonar el potencial de una región, y ser un punto de apoyo para la generación de nuevo conocimiento.


Si hiciéramos una gráfica de los componentes del SRI con la forma de una cebolla, se trataría de una de las capas más externas, puesto que envuelven a todas las demás. Se trata, por así decirlo, de una especie de atmósfera a la que están sujetos los diferentes agentes que interactúan entre sí dentro del resto de los componentes del sistema.


Un componente institucional fuerte es un factor importante para un SRI sólido, y al revés, un componente institucional débil, constituye frecuentemente un marcador importante dentro de un sistema poco funcional. Regresando a la pregunta que titula este post, me pregunto qué ha sido de este organismo por tres razones: (1) porque hace tiempo que no tengo noticias e imagino que ustedes tampoco (2) el reciente cambio de gobierno estatal seguramente viene acompañado de una dirección distinta -o quizá no-, y (3), la importancia de prestar atención a este asunto, cuya operación atañe a todos los que de una u otra manera nos interesa el SRI sonorense. 


No pretendo hacer aquí una caracterización exhaustiva, así que por ahora sólo voy a revisar tres cosas: 1) la página institucional, 2) la cuenta de twitter y 3) las notas periodísticas del último trimestre. Y lo haré rápidamente.


El sitio oficial (desde sonora.gob.mx) no ofrece mayor información, excepto la descripción del organismo ("es un organismo de la Secretaría de Economía y tiene por objeto el apoyo a la investigación Científica, tecnológica e innovación en el estado"), la información de contacto y una liga a la página de transparencia, donde hay información sobre concursos y convocatorias hasta 2018, y acceso al código de ética. Sin embargo, la página coecyt.gob.mx parece funcionar adecuadamente, aunque con información poco actualizada, eventos del 2020 o principios del 2021. Entre ellos iForums, algo que creo que vale la pena revisitar en otro post. También hay un par de convocatorias, una vencida y la otra activa hasta el 18 de octubre, por parte de una fundación internacional.


En cuanto a social media, la última publicación del organismo en Facebook fue el 27 de agosto, donde se avisa de modificaciones por parte del Conacyt a las convocatorias de becas de Posgrados al Extranjero. En twitter, la última publicación es relativamente reciente (9 de octubre), invitando a un evento de WII (Woman Innovation Impact) que se llevará a cabo el próximo lunes. En resumen, poca actividad, prácticamente nula los últimos tres meses.


Las noticias también presentan un aspecto raquítico. En agosto del 2018, el entonces titular, Francisco Antonio Rodríguez Valdez, informaba sobre una reducción de becas para investigadores sonorenses (de cincuenta a nueve) derivada del recorte federal en gastos de Ciencia y Tecnología. 


Creo entonces que, podemos pensar, el Coecyt ha sido fuertemente afectado por recortes federales, y ello ha derivado en un bajo perfil, limitando su participación como institución intermediaria dentro de la red del SRI de Sonora. El problema del presupuesto ya se venía arrastrando desde hace varios años, puesto que la Ley Estatal contemplaba la creación del organismo, pero no expresaba claramente su presupuesto. La nueva ley incluye algunos cambios, me parece no sustantivos, en el tema, pero habría que revisarla de nuevo.


En fin, que o hay poca información al respecto, o una está muy desinformada. Cualquier tip con esta desinformada autora favor de enviarlo a leia.y2k@gmail.com.


Amor a esto: https://www.youtube.com/watch?v=KwUkFly-xQU&ab_channel=SaturdayNightLive


viernes, octubre 08, 2021

Flexibilizando el "paywall" o muro de pago en tiempos pandémicos

Por Talya Aluveaux


De entre los varios hábitos adquiridos durante la primera parte de esta pandemia cuento la lectura obligada de una de las columnas del diario The New York Times dedicada a temas tecnológicos, escrita por Shira Ovide. Hacía tiempo la recibía en mi correo electrónico pero nunca había realmente puesto mayor atención.


Hace un mes, más o menos, comencé a recibir avisos sobre la cancelación de la columna en el formato de correo electrónico, puesto que a partir de septiembre pasaría a estar disponible solamente para los suscriptores de pago del diario. Yo, como suscriptora en modalidad gratuita, tengo acceso a apenas dos o tres artículos para lectura completa al mes, además de los "dispatches" o concentrados que envían al correo y a los que estoy suscrita (NYT Review of Books, Movies, etétera). Como la mayoría de las cosas que me ayudaron a lidiar con la pandemia, la lectura de la columna de Shira Ovide había adquirido status de adicción, así que entré un poco en pánico. 


El aviso del NYT se cumplió a mediados de septiembre, y así me quedé sin acceso a la columna, por una parte, pero por otra, inspirada en la calma que me producía al menos por unos minutos, me dieron ganas de retomar este pequeño blog para revivir un poco ese estado zen, que claro, no es ni de lejos -ni dispone de los recursos, contactos o el tiempo- de On Tech, pero, hey, la imitación es el mejor halago. 


Debo admitir también que tras haber estado trabajando por un tiempo mas o menos prolongado en temas no relacionados con tecnología, dichas lecturas me mantenían conectada a "la matrix". En fin, que para no hacer el cuento muy largo porque además es viernes y todavía no he decidido si voy a publicar de lunes a jueves solamente, y traigo sed de la mala, resulta que otra de las cosas con las que me entusiasmé durante la pandemia fue la idea del levantamiento de pesas, o heavylifting. 


Digo la idea porque los músculos me duelen de solo pensar en levantar algo pesado, pero así es una de contradictoria. Entonces, no sé ni como, llegué a una columna escrita por @swolewoman (handle en Instagram) para VICE, que apenas comenzaba a leer en preparación la futura yo capaz de levantar pesas. El caso es que llevaba apenas un par de semanas leyendo cuando, TRAZ, despidieron a la escritora. 


Afortunadamente, me había suscrito al canal de Discord, en el que había publicado una "guía de vuelo" en formato PDF (que todavía veo con respeto) y a los pocos días recibí un correo-invitación a su nuevo espacio, en el que seguiría escribiendo sus artículos, pero ahora de manera independiente. No le tomó ni tres días hacer el switch. Y así en el mismo correo estaba la opción de hacer un pago de suscripción, o podías optar por mantener las cosas como estaban pero solo recibirías un artículo gratis a la semana, y lo demás estaría detrás de la muralla. Por lo pronto estoy bien así, pero eventualmente me suscribiré, y mis respetos para la capacidad de reacción. 


Poco a poco hemos visto desarrollarse y ganar terreno a nuevos modelos de "suscripción" o maneras de apoyar económicamente a los creadores de contenido y/o productos específicos, desde Patreon hasta Kickstarter, de manera que posibilita la creación de contenido original e independiente patrocinado por sus propios usarios y/o consumidores, y segmentar el tipo de pago (pagas más si quieres una copia autografiada, una tarifa intermedia por acceso a contenido premium, etcétera). 


Con estas cosas en la cabeza fue como llegué hace un par de días a la charla ofrecida vía streaming por la Fundación Gabo, y dedicada al tema de la construcción de audiencias. El ponente era el director y fundador de Eldiario.es, Ignacio Escolar, y aunque la cuestión del modelo de negocios no era precisamente el tema central, sí fue algo que llamó mi atención, porque manejan una filosofía que implica que cualquiera que lo quiera leer, lo puede leer, y sin embargo, el diario está sostenido 100% por sus suscriptores.


Funciona así: El diario tiene un paywall basado en un sistema de honor, en el que ofrece diferentes opciones de suscripción, entre ellas la tarifa normal, la de estudiante y la de trabajador en paro (o desempleado), y también la que podríamos llamar completamente quebrado y no puedo pagar un centavo, sin pedir comprobación de ningún tipo. De esta manera, el diario corre el riesgo de que muchas personas se aprovechen de esta opción aunque en verdad no la necesiten, pero esto, aunque sí sucede, es en un porcentaje muy bajo (me parece que el 2% del total de suscriptores), y la justificación del director me pareció excelente.


Él dijo que le parecía mejor que algunos lectores burlaran el sistema de honor a que las personas que realmente estuviesen pasando por apuros económicos se quedaran sin leer el diario sólo por imponer alguna barrera burocrática innecesaria. Y lo dijo de manera muy convencida. Miren que se trata de un diario con una redacción de más de 120 personas, contenido original, equipo de datos, y la capacidad de generar investigación periodística que ya ha resultado en la dimisión de al menos una alcaldesa.


Interesante, ¿no? Me gusta pensar que dentro de tanta confusión, la ética personal es una solución sencilla y elegante al conflicto entre "la información quiere ser libre" y "no regales tu trabajo", que teóricamente debería funcionar dentro de una sociedad civilizada, pero mejor voy en busca de una cerveza porque ya es viernes, y es mediodía. 

Antes de irnos...

1. En los dos últimos días, General Motors dejó entrever su plan para los próximos años a su grupo de inversionistas. La compañía quiere "un mundo con cero choques, cero emisiones, y cero congestión". El director y CEO Mary Barra explicó que la inversión de la firma en vehículos eléctricos y autónomos ha propiciado un inicio temprano en el tema. La compañía informó que durante el CES 2022 presentará formalmente un pick up Silverado eléctrico. Al parecer el sistema de asistencia de manejo será "hands free" en el 95% de las situaciones.


2. La escasez global de semiconductores ya alcanzó a Ford Hermosillo, obligando a la planta a parar sus líneas de producción por dos días (11 y 12 de octubre) debido a la falta de componentes. 


3. Buenas noticias. Ya no habrá más anuncios negando el cambio climático, al menos no en Google. La compañía retirará la publicidad que contradiga el consenso científico relativo al tema.



jueves, octubre 07, 2021

La desinformación en la red

Por Talya Aluveaux


Tengo que confesar que no veo ni escucho las noticias locales, nacionales ni internacionales. No se trata de la calidad de la producción, sino de mi (inexistente) capacidad para lidiar con el estrés. Mis ansiedades tienen ansiedades y no necesito añadir más, y por alguna razón, el formato de los noticieros es un gatillo para mi.


Eso no significa que no lea noticias, las busque activamente cuando me interesen, o lleguen de manera inevitable dentro de mi (según yo) bastante selectivo feed. Por lo regular me entero de lo que me tengo que enterar, y algunas veces también de algunas cosas que no quisiera. Por Dios, nadie tiene tiempo para eso. No tengo tiempo aunque tenga tiempo. 


En fin, que algunas cosas (de esas que no me interesan), aterrizan en mi cabeza casi siempre de manera desfasada, en alguna plática con alguien mejor enterado, ante su cara de asombro y con mi cara de asombro aún mayor. Algunas veces llega no tan desfasada, como ayer que navegando, me encontré con un tweet que hacía referencia a un grupo de vecinos que protestaban cerrando una calle por la instalación de una antena de telefonía móvil en su colonia.


El motivo, al parecer, es el temor a los efectos del 5G. Ya sé que nos quedamos con cara de oigan, ¿es en serio? Pero sí, es en serio. Tan en serio como las palabras de una persona (profesionista, además) que me dio todo un discurso antivacunas unos días antes de la elección -les debo los detalles porque soy bastante buena para bloquearme en esos difíciles momentos-, tan en serio como todo un segmento de la población que creyó a pie juntillas, validó e incluso lucró con la cura milagrosa (cloro) contra el COVID-19 hace unos pocos meses. Del proceso democrático y las elecciones mejor no hablamos (por ahora).


El caso es que la desinformación corre y se propaga por las venas de internet, social media, los grupos de whatsapp, etcétera, mucho, pero mucho más rápido y de manera más efectiva que de lo que era capaz hace algunas décadas. Hemos tocado el tema sólo de manera tangencial en este blog, pero los algoritmos tienen un importante papel en este fenómeno. Aunque detengámonos ahí, porque a final de cuentas los algoritmos se basan en el comportamiento humano para después poder manipularlo, y los algoritmos son, después de todos, construidos por humanos.


Al final la principal herramienta para combatir la desinformación es la educación, en tanto no tengamos mano firme por parte de las llamadas big tech. Se han dado pasos en la dirección correcta, pero no los suficientes. Por ejemplo, YouTube decidió bloquear por completo toda desinformación antivacunas. Twitter ha dado algunos pasos, como preguntar si se ha leído un artículo o no antes de darle RT o compartirlo, o desactivar por completo a POTUS de su plataforma favorita tras los distturbios el año pasado, precisamente bajo el argumento de incitar la violencia y promover la desinformación.


De nuevo, el sensacionalismo vende. Una de las formas más efectivas para contrarrestar el alud de desinformación es el fact checking, es decir, las unidades de periodismo civil o ciudadano organizadas que se activan para desmentir información errónea, quizá no en tiempo real, pero sí lo más rápido humanamente posible. Claro que activar este tipo de organismos es complicado y tiene un costo económico, algunas veces político, y no todos los diarios y/o organismos civiles están dispuestos a invertir. 


Este, por ejemplo, es uno de los grandes campos de posible acción para el aprendizaje de máquinas o Machine Learning (ML), en función del entrenamiento de los mecanismos necesarios para la detección de la propagación de información errónea, ciertamente lleno de obstáculos y problemas relacionados con significados y minucias del lenguaje, pero definitivamente prometedor. 


Hay mucho espacio para reflexionar, pero preguntémonos una cosa por ahora: ¿en manos de quién debería estar esta tarea? ¿Quién asume la responsabilidad? ¿El Gobierno, la sociedad civil, las big tech o grandes empresas tecnológicas? El camino que se ha mostrado es el de la regulación, pero hay un trecho muy largo y espinoso por recorrer. 


@talya


Antes de irnos


1. A nivel global, las startups recaudaron un total de 150 mil millones de dólares durante el tercer trimestre (Q3) del 2021, al parecer un récord de todos los tiempos.




miércoles, octubre 06, 2021

La economía de plataformas y su (falta de) regulación

Por Talya Aluveaux


Vamos a dejar de lado por un rato a Facebook, sin abandonarlo del todo, porque hoy quiero hablar sobre lo que se conoce como economía de plataformas (platform economy). 


Estamos ciertamente familiarizados con esta combinación de palabras (economía de la atención, economía del conocimiento, the "sharing" economy, the "gig" economy, etcétera), que básicamente tratan de enfocar un fenómeno determinado en la parte económica de éste. En el caso de la economía de plataformas, la disciplina analiza los diversos aspectos económicos involucrados en la operación de éstas, llámese Amazon, Google, Microsoft, Airbnb, Uber, etcétera.


Abarca desde cuestiones relacionadas con el trabajo (salarios, condiciones, relaciones laborales) hasta las repercusiones sociales (y espaciales, ecológicas, culturales, de todo tipo...) ligadas a la llegada de estas nuevas maneras de operar la logística comercial de ciertas actividades económicas.


Ahora todos estamos familiarizados con Uber (o mejor, con Uber Eats), pero quizá no nos hemos detenido a pensar en este fenómeno en términos de economía de plataformas, o en otras palabras, en los cambios económicos y las repercusiones sociales, y también económicas, que implica su sola existencia. Vemos, por ejemplo, a los repartidores ir de aquí para allá en su motocicleta, o llegar al mostrador de un café con su mochila y sus pedidos. Instalamos la app y pedimos un Uber (¿quién se acuerda de los taxis?) cada vez que no hay conductor designado, y con suerte somos usuarios cinco estrellas y el chofer también, y no se pierde ni nos cancela el viaje.


Algunas de estas repercusiones son obvias e instantáneas, por ejemplo, en el caso de Uber: (1) el rechazo de los taxistas hacia el uso de estas nuevas formas de movilidad, controladas a través de una plataforma electrónica -que en algunos países fue verdaderamente visceral-, (2) el cambio nominal del status de concesionario o taxista a "socio" con el que se adherían al negocio los nuevos choferes, (3) la mejora del servicio, la seguridad y la estandarización de las tarifas, la competencia también propició en algunos casos la creación de startups locales inspiradas en el modelo de negocios, y (4) la creación de empleos. En Hermosillo, por ejemplo, la empresa de telemarketing "Teleperformance" obtuvo la cuenta de GrubHub, que eventualmente fue adquirida por DoorDash, un servicio de entrega de comida que compite por el mercado con UberEats en Estados Unidos y Europa. Así que las quejas y lamentaciones de los choferes neoyorquinos -que entregan hasta en bici-, venían a dar a los oídos de jóvenes bilingües Hermosillenses, pero también de otras ciudades mexicanas.


Ahora pensemos en otras no tan obvias, por ejemplo: 1) los cambios en las relaciones laborales en un buen número de casos se traducen en precariedad en términos de salarios raquíticos, escasas prestaciones y falta de seguro médico, entre otras cosas, 2) la modificación de los esquemas culturales de orden y entrega de comida altera las costumbres de los consumidores, las plataformas concentran los pedidos y los restaurantes se ven obligados a participar, pagando una determinada cuota o porcentaje y en ocasiones no estando satisfechos con la logística, organización y resultados del servicio; 3) la pandemia jugó un papel fundamental en el crecimiento de algunas de estas plataformas, al aumentar exponencialmente la práctica de pedir para llevar, y ser considerada una actividad escencial. Poco a poco comenzamos a ver una transición entre los delivery guys (jovencitos) a los que estábamos acostumbrados a señores mayores y padres de familia -al perderse un gran número de empleos, éste era uno seguro y con amplio crecimiento-, y por último, 4) se ha convertido en todo un tema en algunas ciudades, donde incluso se han modificado las leyes para tratar con el asunto.


En Nueva York, por ejemplo, la batalla por el reinado de las aplicaciones de entrega de comida a domicilio está en todo su apogeo. El investigador antimonopolios Moe Tkacik (@moetkacik) discutió recientemente las nuevas leyes sobre el tema en The New Yorker, así como el futuro de DoorDash, Grubhub y Uber Eats.


Sus palabras son un poco duras: "Es sabiduría convencional ahora que estas compañías son intermediarios chupasangre". Tkacik, quien trabaja en la regulación de delivery apps, se va a la yugular. Como siempre, nosotros un poco atrasados en esto. Sin embargo, es necesario poner atención, especialmente en lo que se refiere a la regulación en materia de salario, prestaciones y relaciones laborales, porque en términos de cifras de personas ocupadas, importa tanto la cantidad como la calidad, aunque la mayoría de los políticos parezca opinar lo contrario.


Antes de irnos:


1. Microsoft lanzó Windows 11 ayer globalmente. Las actualizaciones gratuitas a #Windows11 comenzaron a estar disponibles en computadoras equipadas con Windows 10 y precargadas con Windows 11 y #Windows11Pro. ¿Cómo les va con la actualización?


2. Twitch protagonizó un hack masivo que reveló las utilidades de sus creadores de contenido, el top 100. El listado de pagos de septiembre 2021 muestra, por ejemplo, la cantidad de 752 mil 467 dólares, para xQcOW. Nice. Los usuarios de la plataforma deben apresurarse a cambiar la plataforma y usar autenticación de dos factores.


Amor a esto:


El premio nobel de Química 2021 se otorgó anoche de manera conjunta a Benjamin List y David MacMillan, por su trabajo en  herramientas que han revolucionado la construcción de moléculas.

La bio de Miguel; lo prometido es deuda

Por Talya Aluveaux @talya Miguel de Icaza nació en 1972. Es un programador, mejor conocido por iniciar los proyectos GNOME, Mono y Xamarin. ...