lunes, octubre 08, 2012

La fatiga de facebook. Y de las redes sociales en general.

Por Talya Aluveaux*

No quiero decir que no me guste. Es decir... no es Facebook, soy yo. En realidad no tiene nada de malo excepto que me resulta... obtuso. De un tiempo a la fecha soy incapaz de hacer scroll down en facebook sin sentir aburrimiento total, y de alguna manera no es del todo bueno, porque siendo la persona antisocial que soy muchas veces era (es) la única manera (o al menos la más fácil) de permanecer en semicontacto con algunas de las personas de mi vida y/o añadir algo de eso que llamamos "hacer tierra" a mi existencia. Algo. Sólo un poquito.

Lo malo es que facebook se ha vuelto tan ubicuo que me espanta y me estresa. Por un lado, está lleno de señoras y señores cuya vida y acciones vienen a replicarse en el status tal cual, sin la menor gracia y totalmente desangelados, álbumes interminables de fotos repetidas mal enfocadas y carentes del menor atractivo, y en fin, una sarta de sandeces encaminadas a reafirmar ahora sí que el "status" de la persona en cuestión.

Oh so boring.

Lo peor en mi opinión son los teenagers y los newcomers over 50 que finalmente lograron adentrarse en este medio, pero en general nadie se salva. ¿Quién me tiene a mi all roll eyed viendo qué hay de nuevo? ¿qué me importa anyway? no, really... ¿qué me importa que hayan ido a tal o cual restaurante, o fiesta o playa o película o lo que sea? Si al menos se tratara de un update sobre sí mismos, algo corto, interesante, reflexivo, honesto, quizá... del tipo what r u fucking thinking? (not doing, eating or whatever, aunque finalmente you can actually be thinking about IT all the time, but wtf?), y aún así, por qué habrían de compartirlo con todo el mundo (y me pregunto si no sería otra clase de pesadilla).

So anyhow... de alguna manera es como vivir en un infierno en el que todo el tiempo te das cuenta de lo que todo el mundo está haciendo (no necesariamente pensando) y eso es algo que definitivamente no necesito, o quizá sí, si acudimos al argumento de que todo el mundo está allí, y uno es parte del mundo. Supongo que es una cuestión personal. En mis laaaaaargos años de relación odio-amor con facebook he llegado a la conclusión de que lo mejor es poner tierra de por medio cuando me pongo así, cuando me resulta insoportable... simplemente, dejo de entrar y eventualmente regreso a la "normalidad". Nunca he sido tan dramática como para cerrar la cuenta y cosas así.

Lo curioso es que en mi caso la normalidad significa cada vez menos tiempo y más blocks/ocultar/only important/etc... al paso que voy en mi TL sólo aparecerán algunas noticias de tecnología, cultura, ciencia y literatura de diferentes revistas y/o sitios Web, un par de updates de COAT y Greenpeace, la foto del día de National Geographic y muchos, muchos cupcakes gracias a unbaby.me, amén de un círculo selecto de quien siempre, siempre disfruto sus updates, pero puedo contar con los dedos de una mano (o dos, okay) y a quienes dedicaré los 5 minutos que pienso emplear en esta red (jamás conseguiré fb likes con estas actitudes jaja).

Ah, facebook. Nunca has sido interesante, pero ahora lo eres menos. Sin embargo, eres una especie de mal necesario, de no entrar, no me doy cuenta de muchas cosas, avisos que ahora sólo se hacen a través de ti, invitaciones, incluso recados "urgentes". No eres tan fácil de abandonar como abandoné, digamos, el MSN Messenger o Hotmail o Yahoo! o Flickr, no. Ahí están familia y amigos viejos y amigos nuevos y ex-compañeros de trabajo y ex-compañeros de escuela, con sus devenires, y una aquí, pensando que navegar gente (¿personas?) no es tan divertido como navegar ideas y conceptos.

I am not asking for a breakup. Just gimme a break.

Out.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La bio de Miguel; lo prometido es deuda

Por Talya Aluveaux @talya Miguel de Icaza nació en 1972. Es un programador, mejor conocido por iniciar los proyectos GNOME, Mono y Xamarin. ...